1. Es mala.
En pocas palabras, la producción de carne es terriblemente cruel. La crianza moderna de animales ocurre en condiciones de hacinamiento, en instalaciones sucias donde son mutilados sin analgésicos y violentamente asesinados.
2. Está llena de mie**a.
Un estudio reciente realizado por Consumer Reports examinó 458 libras de carne de vaca disponible en supermercados y encontró que todas ellas estaban contaminadas con materia fecal. ¡Guácala!
3. Crees que es bueno para ti, pero no lo es.
Es cierto que la carne tiene proteínas, pero también tiene un montón de colesterol y grasas saturadas. Puedes obtener toda la proteína que necesitas de alimentos nutritivos y deliciosos como las lentejas y el tofu, sin poner en riesgo tu salud.
4. Hace que te enfermes.
Desde E. coli y salmonela hasta Campylobacter y estafilococos, los patógenos en la carne pueden enfermarte gravemente e incluso causarte la muerte.
5. Puede afectar tu corazón…
Los estudios muestran que los consumidores de carne tienen mayores tasas de enfermedades cardíacas, diabetes, accidentes cerebrovasculares e incluso algunas formas de cáncer.
6. Está ocultándote cosas.
Los empaques de carne que encuentras en los supermercados no te dicen que los animales criados para el consumo humano en granjas industriales son alimentados con hormonas, antibióticos y sustancias como ractopamina, prohibida en Rusia, China y la Unión Europea.
7. Es una pérdida de dinero.
El cambio a una dieta vegana es una gran manera de ahorrar dinero. Mira esto para aprender a preparar platillos rápidos, deliciosos y nada costosos.
8. Te impide conocer a mejores personas.
Las personas veganas son talentosas, divertidas y compasivas. Únete a grupos veganos en tu localidad y conocerás gente increíble. Y pide aquí tu Guía vegetariana para principiantes gratis.