Todo lo que crees saber sobre la carne está mal

Durante años, la industria de la carne nos ha hecho creer muchos mitos relacionados con su consumo. En esta ocasión, te demostraremos con pruebas que todo lo que te han dicho sobre la carne es erróneo.

¿Cuántas veces hemos escuchado que si una persona no se alimenta con carne estará débil? Esto no es cierto, una alimentación a base de plantas balanceada correctamente aporta todos los nutrientes necesarios para una salud óptima. ¿No nos crees? Mira cómo estos atletas y deportistas derriban el mito de que solo puedes obtener músculos al consumir proteína animal.

Hoy en día, diversos estudios han relacionado el consumo de carne con un mayor riesgo de padecer enfermedades como diabetes, cáncer colorrectal y padecimientos cardíacos. En 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un estudio en el que el consumo de carne procesada fue ubicado en la misma categoría de riesgo de cáncer que la exposición al asbesto y fumar cigarrillos. Por otro lado, el año pasado, un estudio publicado en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias (Proceedings of the National Academy of Sciences – PNAS) concluyó que si todos los habitantes del planeta adoptaran una alimentación a base de plantas, se evitarían muchísimos problemas de salud. Así que, ¿comer carne es sano? Error.

Muchas personas también creen que consumir carne es parte de un proceso natural, que los animales “nos dan su carne” o que están “hechos para eso”. Esto es completamente falso.
Para empezar, los animales son individuos con intereses propios, quienes sienten dolor, miedo, tristeza y son capaces de establecer relaciones con sus semejantes. En segundo lugar, no hay nada “natural” en el proceso de explotación de animales. En las granjas industriales, millones de cerdos, vacas y aves padecen constantes abusos, golpes y confinamiento extremo, y al final son asesinados de una forma cruel y violenta.

Mira este video de cómo la carne llega a tu mesa.


Hoy es el momento de retirarle todo tu apoyo a esta cruel industria y elegir una alimentación compasiva.