En estas granjas, los peces son confinados en estanques que contienen miles de peces a la vez. Los animales sufren un estrés extremo por las condiciones de hacinamiento y la mala calidad del agua. Al igual que las granjas industriales donde se explotan vacas, cerdos y pollos, las piscifactorías se han convertido en criaderos de bacterias resistentes a los medicamentos y en focos para la propagación de enfermedades.
Además de las miserables condiciones de vida, los peces están sujetos a una crueldad extrema. En el video, se observa cómo un pez es capturado para realizar una prueba rutinaria de calidad. Un trabajador corta la cola del pez y arroja al animal aún vivo de nuevo al estanque. Debido a que el cerebro del animal y gran parte de la médula espinal están intactos, es probable que el pez experimente un dolor intenso mientras agoniza. Las imágenes muestran a dos peces que han sido cortados por la mitad de esta manera, retorciéndose de dolor durante varios minutos.
Los peces que logran sobrevivir a las horribles condiciones de esta granja son sacados del agua en redes de pesca para ser transportados al matadero. Sacar a un pez del agua reduce peligrosamente el oxígeno disponible, y algunos peces quedan aplastados por el peso de otros. Luego los dejan caer en tanques oscuros dentro de camiones de transporte.
En el matadero, los peces se vierten de los tanques a una cinta transportadora, donde se dejan un rato y comienzan a asfixiarse. En uno de estos mataderos, el investigador documentó a los peces recibiendo descargas eléctricas con una picana eléctrica. Si bien esto inmoviliza a los animales para que los trabajadores los manejen más fácilmente, no hay evidencia de que evite que sientan dolor. Después de recibir la descarga, los peces son empujados a un transportador que los lleva al matadero.
Esta investigación expone el cruel trato que reciben millones de peces cada año, a pesar de todos los estudios científicos que demuestran que los peces no son simplemente animales sintientes, sino también inteligentes con pensamientos y emociones complejas. De igual manera, son capaces de aprender unos de otros e incluso de cooperar hacia objetivos comunes. Los peces merecen algo mucho mejor.