Atleta olímpico rescata a 90 perros que iban a ser asesinados para el mercado de carne

Gus Kenworthy, esquiador de estilo libre de Estados Unidos, es uno de los atletas que ha manifestado su rechazo al consumo de carne de perro durante los Juegos Olímpicos de Invierno en Pyeongchang, Corea del Sur. Y no sólo eso, ¡rescató a 90 perros de una granja! La conmovedora historia fue reseñada en el Daily Mail.

El rescate se llevó a cabo con el apoyo de Humane Society International, organización que estima que hay alrededor de 17,000 granjas de perros explotados como alimento en Corea.

Por fortuna, 90 perros tendrán una nueva oportunidad gracias a que el dueño de la granja decidió dejar de asesinarlos para el mercado de carne.

Gus compartió su experiencia en Instagram, donde señaló que “la forma en que se trata a estos animales… es completamente inhumana y la cultura nunca debe ser un chivo expiatorio de la crueldad”.

This morning Matt and I had a heart-wrenching visit to one of the 17,000 dog farms here in South Korea. Across the country there are 2.5 million dogs being raised for food in some of the most disturbing conditions imaginable. Yes, there is an argument to be made that eating dogs is a part of Korean culture. And, while don’t personally agree with it, I do agree that it’s not my place to impose western ideals on the people here. The way these animals are being treated, however, is completely inhumane and culture should never be a scapegoat for cruelty. I was told that the dogs on this particular farm were kept in “good conditions” by comparison to other farms. The dogs here are malnourished and physically abused, crammed into tiny wire-floored pens, and exposed to the freezing winter elements and scorching summer conditions. When it comes time to put one down it is done so in front of the other dogs by means of electrocution sometimes taking up to 20 agonizing minutes. Despite the beliefs of some, these dogs are no different from the ones we call pets back home. Some of them were even pets at one time and were stolen or found and sold into the dog meat trade. Luckily, this particular farm (thanks to the hard work of the Humane Society International and the cooperation of a farmer who’s seen the error of his ways) is being permanently shut down and all 90 of the dogs here will be brought to the US and Canada where they’ll find their fur-ever homes. I adopted the sweet baby in the first pic (we named her Beemo) and she’ll be coming to the US to live with me as soon as she’s through with her vaccinations in a short couple of weeks. I cannot wait to give her the best life possible! There are still millions of dogs here in need of help though (like the Great Pyrenees in the 2nd pic who was truly the sweetest dog ever). I’m hoping to use this visit as an opportunity to raise awareness to the inhumanity of the dog meat trade and the plight of dogs everywhere, including back home in the US where millions of dogs are in need of loving homes! Go to @hsiglobal’s page to see how you can help. #dogsarefriendsnotfood #adoptdontshop ❤️🐶

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Incluso, dijo que le habían asegurado que los perros de esta granja estaban en “buenas condiciones”. Pero cuando él llegó al lugar, se encontró con la realidad: “los perros aquí están desnutridos y maltratados físicamente, son metidos en pequeños corrales con piso de alambre y expuestos a climas extremos, desde el helado invierno hasta las condiciones abrasadoras del verano”.

Esto nos suena bastante familiar, ¿cuántas veces la industria que explota a los animales para convertirlos en comida asegura que ellos reciben los mejores cuidados y no son maltratados? Ésta es sólo una de las mentiras que la industria ha difundido por años entre los consumidores.

Si crees que ningún perro merece terminar en nuestro plato, ¿por qué no extender tu empatía y compasión a los millones de animales confinados en granjas que, al igual que los perros, son inteligentes y sensibles?

Coincidimos con Gus: no podemos excusarnos en la cultura para justificar la crueldad. Si piensas que confinar y asesinar gallinas, cerdos, vacas y otros animales es parte de nuestra cultura, ¡te tenemos una buena noticia! ¡Puedes elegir no participar en esta crueldad!

Deja de apoyar esta espantosa industria: boicotea sus productos y adopta una alimentación vegana compasiva. ¡Haz clic aquí para comenzar!