Industria pecuaria: la crisis que alimenta la inimaginable crueldad contra los animales, los riesgos para la salud humana y la destrucción del ambiente

Descubre la realidad oculta detrás de la industria pecuaria, también conocida como ganadería. Conoce las serias consecuencias que tiene para los animales, el ambiente y nuestra salud.

Detrás de las puertas cerradas de la industria pecuaria, miles de millones de animales soportan un sufrimiento inimaginable para alimentar una demanda mundial de carne, lácteos y huevos baratos. Pero el impacto de este sistema va mucho más allá de los animales de los que abusa: pone en peligro la salud humana y contribuye a la destrucción del medioambiente.

 

A medida que la industria pecuaria sigue expandiéndose, la necesidad urgente de un cambio sistémico nunca ha sido tan clara.

La evolución de una crisis

La historia de la industria pecuaria está marcada por la creciente explotación y crueldad. Si bien la domesticación de animales comenzó hace miles de años, la Revolución Agrícola británica intensificó el trato a los animales como simples unidades de producción. Esta tendencia empeoró en el siglo XX con los avances tecnológicos y políticas gubernamentales que impulsaron el auge de la industria pecuaria a gran escala.

 

Originalmente concentrada en naciones más ricas, la industria pecuaria se está expandiendo rápidamente a países en Asia, África y Latinoamérica, donde la demanda por productos de origen animal baratos está creciendo.

Crueldad contra los animales y sufrimiento inimaginables

La realidad detrás de la industria del huevo

Cada año, más de 50,000 millones de pollos son criados y asesinados en el mundo, de los cuales más de 90% debe soportar los horrores de la industria pecuaria.

Las gallinas son hacinadas en jaulas que les impiden desplegar las alas, y a menudo se les corta el pico sin anestesia. Estas aves mueren a causa de las terribles condiciones, y sus cuerpos se pudren junto a otras gallinas que ponen huevos para consumo humano.

Sufrimiento y explotación en la industria de los lácteos

Para la producción de leche, las vacas son inseminadas a la fuerza en repetidas ocasiones, sólo para que les arrebaten a sus bebés poco después de nacer. Estas vacas sufren enfermedades dolorosas como la mastitis debido al ordeño constante y están confinadas en condiciones extremas. Más de 300 millones de vacas soportan estas prácticas inhumanas cada año.

Mutilaciones

Alrededor de mil millones y medio de cerdos se crían en granjas industriales. Muchos son confinados en jaulas de gestación tan pequeñas que ni siquiera pueden darse la vuelta. Soportan un maltrato incesante desde el día en que nacen. Los cerditos machos chillan de dolor cuando les arrancan los testículos y les cortan su sensible cola sin anestesia.

Crecimiento forzado

Los pavos se crían para que crezcan a un tamaño anormal, lo que les provoca dolorosas deformidades y problemas cardíacos. En el matadero, estas aves son extraídas de sus jaulas de transporte y colocadas de manera violenta boca abajo en grilletes metálicos. A muchas les cuesta respirar. Otras sufren fracturas óseas.

Canibalismo entre especies y enfermedades

Más de 100 mil millones de peces y camarones soportan un intenso sufrimiento en sistemas de cultivo sobre poblados. Desde el agua hasta la mesa de corte, los peces son torturados. Son asfixiados, despellejados y desmembrados, a menudo cuando aún están conscientes y pueden sentir dolor. Estas condiciones provocan lesiones y enfermedades. Los peces a menudo pierden la vista o se infectan con parásitos.

Y por si fuera poco, las granjas de pulpos han proliferado en los últimos años. En estas instalaciones, cientos de pulpos viven hacinados en tanques, lo que les impide realizar comportamientos naturales de su especie. El confinamiento tiene consecuencias psicológicas tan graves que algunos pulpos se vuelven agresivos y hasta recurren al canibalismo.

Riesgos para la salud pública

Mientras los animales se enfrentan a una crueldad inimaginable, la industria pecuaria plantea graves riesgos para la salud humana. El uso excesivo de antibióticos en estas instalaciones está generando bacterias resistentes a los antibióticos, una grave amenaza para la salud pública según la Organización Mundial de la Salud.

 

Además, las condiciones de suciedad y hacinamiento de las granjas industriales son un caldo de cultivo para enfermedades que pueden saltar de los animales a los humanos, como la gripe aviar y la gripe porcina. Estas enfermedades zoonóticas tienen el potencial de causar pandemias mundiales, lo que pone en peligro millones de vidas.

Una crisis climática global

El coste medioambiental de la industria pecuaria es sorprendente. Esta industria es responsable del 14.5% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, más que todo el sector de transporte junto. La producción de alimento para animales, que requiere grandes cantidades de tierra y agua, es una de las principales causas de deforestación, sobre todo en el Amazonas, donde se talan bosques para plantar soya.

 

Las granjas industriales también consumen enormes cantidades de agua; se necesitan aproximadamente 15,000 litros de agua para producir un solo kilogramo de carne de vaca. Además, los residuos producidos por estas granjas contaminan ríos, lagos y océanos, lo que crea zonas muertas donde no puede sobrevivir la vida. La industria pecuaria está empujando a nuestro planeta hacia una crisis climática, y todos padeceremos las consecuencias.

Cambiar el mundo para los animales; cambiar el mundo por un bien mayor

En Mercy for Animals luchamos para acabar con la crueldad de la industria pecuaria. Mediante investigaciones encubiertas, revelamos el sufrimiento que padecen los animales a puertas cerradas. Nuestra defensa jurídica presiona para que se promulguen leyes más estrictas que protejan a los animales, mientras que nuestra labor de divulgación empresarial anima a las empresas a adoptar prácticas más humanas y a optar por productos de origen vegetal.

 

También trabajamos para educar al público sobre el impacto de sus elecciones alimentarias. Capacitamos a las personas para que se posicionen en contra de la crueldad y a favor de un mundo más compasivo y sostenible. Juntos podemos acabar con la industria pecuaria y construir un futuro en el que todos los seres sean tratados con respeto y amabilidad.

¡Haz una aportación!

Por medio de una aportación económica, puedes ayudar a construir un futuro mejor para los animales confinados en granjas.