De acuerdo con información de News Medical, el Departamento de Investigación Celular e Inmunología de la Escuela Shmunis de Biomedicina e Investigación del Cáncer (Facultad de Ciencias de la Universidad de Tel Aviv), realizó un estudio a nivel internacional que ha logrado identificar un vínculo molecular directo entre las dietas a base de carne y lácteos y el desarrollo de anticuerpos en la sangre que aumentan las posibilidades de desarrollar cáncer.
Estos estudios nos ayudan a conocer el impacto negativo que el consumo de animales tiene en nuestra salud. La buena noticia es que no necesitamos explotar a los animales para comer delicioso y nutritivo. Hoy en día existen muchas opciones de carnes y lácteos a base de plantas que además de ayudar a tu salud, ayudan a los animales y al planeta.
El ácido N-glicolilneuramínico (Neu5Gc) es una molécula de ácido siálico que se encuentra en la mayoría de los mamíferos no humanos. Desde la infancia, los seres humanos empiezan a desarrollar anticuerpos contra esta molécula al exponerse por primera vez a productos lácteos y cárnicos.
Para este estudio los investigadores midieron la cantidad de azúcar Neu5Gc en una variedad de alimentos lácteos y cárnicos. El Dr. Padler-Karavani, autor principal del estudio, indicó:
Encontramos una correlación significativa entre el alto consumo de Neu5Gc de carnes rojas y quesos y un mayor desarrollo de los anticuerpos que aumentan el riesgo de cáncer.
El Dr. Padler-Karavani agrega que esta combinación de métodos permitió a los investigadores predecir que aquellos que comen mucha carne roja y queso desarrollarán una variedad diferente de anticuerpos en altos niveles y, por lo tanto, pueden tener un mayor riesgo de cáncer, especialmente cáncer colorrectal.