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Por primera vez en México, un investigador encubierto de Mercy For Animals Latinoamérica documentó la crueldad animal que esconde una incubadora de pollitos que serán explotados y engordados por la industria de la carne.
Nuestra más reciente investigación encubierta revela prácticas inimaginables:
- La incubadora tira a los pollitos bebés que tienen alguna deformación o herida a la basura mientras siguen vivos. Estos polluelos mueren sofocados dentro de las bolsas de plástico.
- Cada día, la incubadora desecha alrededor de 3,000 pollitos recién nacidos.
- En estas instalaciones, los polluelos son manejados sin el más mínimo cuidado: los trabajadores los toman de sus frágiles alas y después los avientan a las cintas transportadoras.
- Luego, estas aves son empacadas masivamente dentro de cajas que a menudo les aplastan el cuello. En las imágenes puede verse que algunos pollitos mueren en este proceso.
Esta incubadora somete a los pollitos que aquí nacen a prácticas que bien podrían ser parte de una película de terror, algo que ningún individuo debería experimentar.
Nuestra investigación se llevó a cabo dentro de una incubadora que cría pollos que serán explotados por su carne. La industria de la carne de pollo seleccionó esta raza de ave genéticamente para que superara su tamaño estándar, para que sobrepasara sus límites corporales naturales y para que le resultara rentable en términos de venta. El peso y el tamaño excesivo de estos pollos les provocan varios problemas de salud y un alto nivel de incomodidad y sufrimiento.
Sin embargo, el maltrato contra los pollitos recién nacidos puede ser igual o mucho peor en la industria del huevo. Las incubadoras de gallinas crían una especie genéticamente modificada de aves para que puedan poner la mayor cantidad de huevos y no para crecer con la misma velocidad que los pollos explotados para producir carne. Como los machos crecen mucho más lento y su carne sería más cara que la que está a precio del mercado, la industria del huevo mata a los pollos macho de esa especie, por no considerarlos rentables ni útiles. Al año, más de 7 mil millones de pollitos machos recién nacidos mueren en todo el mundo por esta razón. Para poner en perspectiva el tamaño del problema, en el mundo existen aproximadamente 7.9 mil millones de personas. Cada año la industria que explota a las gallinas por sus huevos mata a casi la misma cantidad de pollitos.
A esta exorbitante cifra se suma la cantidad de gallinas que las granjas industriales mandan al matadero cuando su puesta de huevos disminuye, además de todos los otros animales que la industria de los alimentos mata todos los días: pollos, cerdos, conejos, vacas, corderos, terneros y muchos más.
Los pollos son tan capaces de experimentar dolor y sufrimiento como nuestros amados perros y gatos, y merecen la misma protección contra el abuso y la crueldad. Como sociedad civilizada, es nuestra obligación ética detener la crueldad contra todos los animales, incluidos los pollos y otros animales confinados en granjas.
Es hora de dar un paso al frente y dejar que se escuche tu voz. Firma la petición y compártela con tu círculo. Entre más personas conozcan los horrores de la industria, mayor presión podremos ejercer sobre los organismos responsables de evitarla.
Queremos asegurarnos de que los animales sean tratados con respeto y de que su bienestar esté garantizado por el gobierno, pero también queremos recordar que la mejor manera de ayudar a los animales, y la más inmediata, es dejarlos fuera de nuestro plato hoy mismo.
Únete a Mercy For Animals en la construcción de un mejor sistema alimentario, uno que no sólo sea amable con los animales, sino esencial para el futuro de nuestro planeta y quienes lo habitamos.
Si quieres más información acerca de cómo alimentarte sanamente sin necesidad de comer animales ni productos derivados de su explotación, entra a www.eligeveg.com.