Lo escuchamos todo el tiempo: “soy vegetariano, pero como pescado”. Seamos claros. Los peces no son verduras. Y comer peces es comer carne.
Según el diccionario Webster, una persona vegetariana es aquella “que no come carne: alguien cuya alimentación es a base totalmente de verduras, frutas, granos, nueces y a veces huevos o productos lácteos”. Por definición, un vegetariano no come carne animal, incluida la carne de los peces.
Las palabras “vegetariano” y “vegano” pueden ser fácilmente malinterpretadas: en ciertos contextos, el vegetarianismo se describe como una alimentación 100% a base de plantas y en otros incluye lácteos y huevos. Sin embargo, una alimentación vegetariana nunca incluye peces.
Aquellos que consumen mariscos pero no animales terrestres son conocidos como pescetarianos, no vegetarianos.
Algunas personas adoptan una alimentación vegetariana reduciendo poco a poco los productos de origen animal. Durante un tiempo, pueden seguir consumiendo peces. Pero esto no debe ser el objetivo final, especialmente si la decisión se originó en el deseo de retirar el apoyo a las industrias que explotan a los animales.
No hay otra manera de decir esto: comer peces es increíblemente cruel.
Los científicos han demostrado que los peces y otros animales sienten dolor y sufren. Los peces son incluso similares a los perros, gatos y otros animales en la forma en que sienten placer.
Al igual que los cerdos, las vacas y las gallinas, los peces asesinados para obtener carne sufren inmensamente. En 2011, Mercy For Animals realizó una investigación encubierta en una instalación de sacrificio de peces y descubrió que los desollaban vivos. Mientras los peces trataban de obtener oxígeno, su piel era arrancada con alicates. Los peces se agitaban y luchaban por escapar del cuchillo de los trabajadores.
Mira este horror:
La alimentación vegetariana consiste en plantas, no en carne animal. Los peces no son plantas. Y ser vegano significa no consumir ningún producto derivado de la explotación de los animales.
Lo mejor que podemos hacer para retirar nuestro apoyo a la cruel, insostenible e insalubre industria pesquera es dejar a los peces fuera de nuestro plato y adoptar a una alimentación vegana compasiva.
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