A veces es difícil ver el impacto que nuestras decisiones tienen en los demás. Éste es sin duda el caso de las gallinas, los peces, los cerdos, las vacas y otros animales explotados como alimento, confinados fuera de nuestra vista, generalmente en lugares remotos y rurales. Esta distancia hace que sea fácil ignorar el sufrimiento y la crueldad que padecen los animales en las granjas industriales (por esto es que las investigaciones encubiertas que exponen el abuso son tan importantes).
Los animales de granja son quizás los más maltratados del planeta. Desde el momento en que nacen, son víctimas de prácticas que pocos de nosotros podemos imaginar, incluyendo el confinamiento extremo y las mutilaciones sin analgésicos.
Pero después de descubrir el terrible abuso que padecen miles de millones de animales cada año, muchas personas todavía se preguntan si comer alimentos veganos realmente hará una diferencia para los animales. Y la respuesta corta es sí.
En promedio, cada año una persona consume alrededor de 30 animales de granja. Al elegir alimentos sin productos derivados de animales, evitamos que al menos 30 de ellos vengan al mundo a padecer una vida de crueldad y sufrimiento.
Pero eso es sólo el comienzo. Cada año, innumerables animales acuáticos también son asesinados para el consumo humano. Y son literalmente innumerables, ya que los peces y otros animales acuáticos capturados a menudo se registran en libras, en lugar de individuos asesinados. Algunos investigadores señalan que una “libra de animales” puede equivaler a varios cientos ya que muchos de estos animales, como los camarones, son muy pequeños.
Además, cada año millones de animales silvestres, incluidos osos, coyotes y zorros, mueren porque son percibidos como una amenaza para las vacas y otros animales explotados como alimento. Para que te des una idea, en los Estados Unidos, aproximadamente 2 millones de animales silvestres son asesinados por ese motivo cada año.
Por si fuera poco, según Whale and Dolphin Conservation, más de 300,000 ballenas, marsopas y delfines mueren cada año al ser atrapados en las redes de pesca. La industria de la pesca comercial también asesina a un sinnúmero de peces, tortugas y otros animales marinos que no son “comercializables”.
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Al igual que nosotros, los animales quieren vivir sin sufrimiento. Pero en las granjas industriales son sometidos a un tratamiento que sería ilegal si la víctima fuese un perro o un gato. Al llevar una alimentación a base de plantas estamos construyendo un mundo menos violento y más compasivo y sostenible. Con millones de veganos en todo el mundo, ¡piensa en cuánto sufrimiento podemos evitar!
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